Docentes UC indagan en nuevas formas de medir la mentalidad de crecimiento a estudiantes chilenos

Santiago, martes 4 de diciembre 2018 – La mentalidad de crecimiento es una pieza importante para alcanzar calidad educativa según lo define el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación en Chile, dado que impacta dos de sus indicadores: desempeño académico y motivación escolar. Medirla permite saber si los estudiantes consideran que pueden desarrollar nuevas habilidades educativas, o, por el contrario, tienen una mentalidad fija y consideran que las habilidades son innatas.

Según datos arrojados por Agencia de la Calidad de la Educación tras un cuestionario realizado en el SIMCE 2017, más de la mitad de los estudiantes tiene una mentalidad fija. Esta proporción es aún más baja en sectores socioeconómicos bajos, revelando que desarrollar esta mentalidad en Chile es también un asunto de equidad.

Generar sistemas de medición adecuados para hacer seguimiento a la mentalidad de crecimiento en nuestro país sería un avance importante en esta materia, que permitiría aplicar estrategias adecuadas para incentivar en los establecimientos escolares esta práctica. Es por ese motivo que un grupo de académicos de la Universidad Católica, apoyados por el Centro de Políticas Públicas UC, realizaron una investigación para distinguir cuál de todas las mediciones de mentalidad de crecimiento disponibles en el mundo son mejores predictores de comportamientos para nuestro país.

“Hasta ahora no hay en Chile políticas formales dedicadas a desarrollar una mentalidad de crecimiento entre los estudiantes”, explicó el director del Centro de Políticas Públicas, Ignacio Irarrázaval. Agregó que, “un gran avance fue la inclusión de este instrumento aplicado por la Agencia de Calidad de la Educación. Estas mediciones son un primer paso para levantar atención en el tema y motivar el desarrollo de esta mentalidad”.

Sobre los sistemas de medición y lo que implicó para esta investigación, la profesora de la Escuela de Gobierno UC, Susana Claro, explicó que, “uno de los grandes desafíos pendientes es identificar cómo las escuelas pueden promover la motivación escolar. A pesar de que la literatura se muestra optimista respecto a cómo desarrollarlos, aún sabemos muy poco sobre cómo desarrollar esta mentalidad entre los estudiantes chilenos”.

Se estudió a alumnos del colegio Santo Tomás de Ñuñoa de primero y tercero medio (entre 14 y 18 años) y quienes ya habían participado en la medición de mentalidad del cuestionario SIMCE 2017.

Los docentes descubrieron que una potencial medida objetiva de la mentalidad es el tamaño de la pupila, un marcador del estado cognitivo que tiene el beneficio de poder ser medido de forma no invasiva. El tamaño de la pupila se correlaciona con la dificultad de las tareas, la valencia emocional y los estados de excitación que una tarea produce en mamíferos. Para estos efectos fueron monitoreados mientras realizaban un ejercicio de matemáticas por medio de eye-tracker (cámara remota y luz infrarroja).

“Nuestro instrumento que mide mentalidad de crecimiento específicamente en matemáticas fue el que mejor logró distinguir poblaciones de estudiantes. La dinámica pupilar se vio fuertemente relacionada con estados atencionales, los que varían en el tiempo. Esto nos lleva a sugerir que la mentalidad de crecimiento no es una característica monolítica”, explicó el académico de la Facultad de Medicina, Tomás Ossandón, “vimos que los estudiantes que presentaron una mayor mentalidad de crecimiento, también tuvieron una mayor respuesta pupilar en ciertos o todos los períodos de la tarea. De esto se extrae que una mayor mentalidad de crecimiento estaría asociada a que los estudiantes dediquen mayor esfuerzo cognitivo y/o mayor atención a la resolución de los mismos”.

“Este tipo de información puede permitir a docentes y establecimientos educacionales a tener un mejor diagnóstico de la situación escolar con respecto a mentalidad y motivar a estrategias más acertadas.”, agregó Susana Claro.

La académica de la Escuela de Gobierno señaló además que las mediciones utilizadas bajo métodos de encuesta de Farrington (que discrimina sobre el esfuerzo asociado a objetivos) y de Dweck-5 y/o Dweck-6 (logran distinguir aspectos de la mentalidad de crecimiento asociados al compromiso o esfuerzo durante la resolución misma de problemas), deben ser utilizados en conjunto para futuras encuestas de Agencia de Calidad de la Educación, pues permitiría obtener mayor precisión y elementos para entender la mentalidad de crecimiento que poseen los estudiantes.

Los académicos esperan continuar con estudios futuros concentrándose en medir el impacto de intervenciones como éstas y mejorando el sistema de medición de mentalidad. Para esto se están implementando estrategias de desarrollo de mentalidad de crecimiento en siete establecimientos educacionales en Chile de manera aleatoria y también, gracias a la reciente adjudicación de FONIDE 2019, se podrá continuar con la validación de instrumentos a través del diámetro pupilar.

“Se cruzan elementos que tiene que ver con los recursos locales con recursos de la administración central. Hay decisiones que tiene que ver con el gobierno central y esperamos que este reordenamiento político administrativo nos pueda hacer enfocar la discusión hacia el acceso a una ciudad justa”, dijo.

“Es posible transformar chile desde los municipios, probablemente no desde uno solo pero tampoco sin ellos”, concluyó Claudio Castro.